lunes, 5 de mayo de 2008

Cumbal – Nariño – Colombia.
El Municipio de Cumbal, se encuentra situado al sur del Departamento de Nariño (a 110 km de la capital San Juan de Pasto), en el límite con la República del Ecuador, su cabecera municipal a 3.000 metros sobre el nivel del mar y con un clima que va desde las nieves perpetuas hasta el cálido tropical en los corregimientos de San Martín y Mayasquer.
Cumbal fue fundado por el Cacique Cumbe en 1529. Los vestigios de los primeros pobladores indígenas se han encontrado en tumbas en las cuales perecieron con la creencia de proteger sus familias y riquezas de los colonizadores españoles.
Su historia se enmarca por las dos visitas del Libertador Simón Bolívar y algunas batallas que anegaron de sangre a la Gran Colombia, es de importancia nombrar a José Antonio Llorente hijo de este pueblo, quien sería firmante del acta que puso fin a la Guerra de los Mil Días.
Su población es de 35 mil habitantes de los cuales el 14% corresponden al sector urbano y el 86% repartida en cuatro reservas indígenas de la etnia de Los Pastos: Cumbal, Panán, Chiles y Mayasquer, lo cuales conservan su cultura ancestral, tradiciones, costumbres, medicina, cultivos y gobierno de cabildos.
En diciembre de 1923 la tierra se sacudió, las casas se desmoronaron en medio del impresionante terremoto que destruyó el antiguo pueblo de Cumbal, del cual hoy sólo quedan las ruinas, la desolación fue total, muchas familias huyeron despavoridas por el catastrófico sismo y jamás retornaron y quienes en asentamientos formaron las colonias a lo largo y ancho del país y del mundo. Los pocos sobrevivientes se trasladaron al llano de piedras (reserva indígena) donde construyeron ranchos de bahareque y paja y fundaron el nuevo pueblo de Cumbal al pie del impetuoso Volcán Nevado de Cumbal.
La laguna de Cumbal a tan sólo 6 km del casco urbano, es un lugar de encanto, leyendas, vida silvestre y pesca deportiva. Ofrece a los visitantes espectaculares paseos en lancha, caminata por senderos ecológicos y la deliciosa trucha arcoíris. En sus aguas se reflejan los volcanes Chiles y Cumbal. A una altura de 3.600 metros sobre el nivel del mar, la Laguna de Cumbal es la fuente sagrada de los indígenas y lugar de esparcimiento de propios y visitantes. Se recomienda protegerse con ruana de lana de oveja tejida en Cumbal, guantes, bufandas y gorros para no sucumbir al intenso frio.
El ascenso al Volcán Nevado de Cumbal, empieza en la Vereda “La Ortiga” a 20 minutos (en carro) desde la población. Atravesando caminos de lodo, piedra, arena y por senderos de paja y fraylejón, después de 4 horas de dura caminata se llega a la cima del Cumbal, desde donde se puede apreciar la esplendorosa cordillera de los Andes en territorio ecuatoriano, el Océano Pacífico a 100 km aproximadamente; los cóndores símbolo de la grandeza americana revolotean los aires cumbaleños. En la cumbre del Volcán se pueden apreciar los cráteres con sus fumarolas permanentes que dejan grandes cantidades de azufre aprovechadas por los indígenas. El paisaje y el colorido cambian, la montaña se vuelve blanca, las botas se hunden en la nieve, el viento tiene el sonido de las zampoñas, inmensas cavernas guardan toneladas de hielo que los indígenas extraen para venderlo luego en el mercado de Cumbal, con el se producen los chupones, salpicones y helados de paila.
Por sus hermosos paisajes y su caprichosa geografía miles de personas tanto del interior del país como del exterior visitan esta región, así mismo son llamativas sus actividades como la pesca de la trucha arcoiris, las fiestas de toros, los festivales de indígenas, las aguas termales de Chiles y el Salado, el ascenso al volcán, la piedra de los Monos en la Vereda de Tasmag, reliquia esculpida en una enorme roca con dibujos precolombinos. A los turistas les encanta integrarse a las fiestas patronales en el mes de julio, la vaca loca, los castillos y culminar degustando el famoso “hervido”, bebida tradicional y doméstica de caña.
Los platos típicos de Cumbal son: el cuy asado, trucha frita, papas con queso, miel con cuajada, habas cocinadas y ollocos en su agua, habas tostadas, surullos de harina, tortillas en callana, chicha, champús y chancuco.
Esta tierra cumbaleña es nuestra madre, nosotros somos su barro. El aire, el suelo, el cerro forman parte de nuestra vida. Esta tierra guarda en paz las cenizas de nuestros mayores, su sangre y su esperanza, nosotros somos su semilla. Es la tierra de los amores maternales, olor de piñuelas y tausos, historias de fríos y surcos, de amarguras y alegrías que caminan por los parajes de piedra, azufre y nieve.
Ricardo Estupiñán Bravo.

4 comentarios:

rocio dijo...

sin duda alguna en pueblo cumbaleño tiene mucho que mostrar y dar a conocer,lastima que falte un poco de iniciativa por parte de la alcaldía municipal y de empresas de turismo en fomentar esta actividad, que le quedaría muy bien a Cumbal, con toda esa gran riqueza en atractivos y sitios turísticos..el sur de Colombia tiene mucho que ofrecer y es por eso que es todo un paraíso...

JP dijo...

Muy bnooo seria bno q hagan esto o amplien la informacion.. :D

Bea dijo...

Hola Norberto,
Soy nariñense, y aunque no vivo por esas hermosas tierras quiero subir al volcán Cumbal en diciembre de este año.
Crees que puedas compartir conmigo algunos datos como: un hostal donde pasar la noche el día antes de subir? Un local o guía que nos acompañe a subir?
Gracias por tu ayuda.

ESPERANZAYARENA dijo...

HOLA NORBERTO, VIVO EN BOGOTÁ Y TENGO DESEOS DE IR A CUMBAL Y A SUS RESGUARDOS. IGUAL QUE A LA CASA DE LA CULTURA -SI LA HUBIERE- ¿ES POSIBLE HACERLO? ¿CON QUIÉN DEBO CONTACTARME?

GRACIAS. UN ABRAZO.
robertivargas@yahoo.es